La tarde del lunes, 4 de mayo, no era una tarde normal. Los alumnos del Colegio tenían un cosquilleo especial y bullían por todas partes con atuendos poco habituales.
A partir de las tres de la tarde, unos en el Salón de Actos (Secundaria y Bachillerato), otros en sus aulas recibieron cumplida información de lo que nos disponíamos a celebrar: la cuenta atrás en el proceso de canonización del Padre Damián ¡quedan 160 días!A continuación, todos salimos al patio – donde ya esperaban un buen número de familias- y juntos, en un cordial espíritu de Comunidad Educativa, rezamos la oración de Damián al tiempo que los pequeños formaban en un hermoso mosaico el logotipo de la canonización rodeados, en un simbólico abrazo, por los alumnos mayores. Actuaron, como maestros de ceremonias, Luisa Fernanda Sainz de Aja y Jeremías Cuesta ss.cc.
Tras un emotivo minuto de silencio en el que se pone de manifiesto el deseo expresado en la Carta de los Superiores Generales “Demos gracias a Dios y compartamos nuestra alegría con las personas que nos rodean. Es la alegría de la Iglesia entera; y la alegría de una humanidad sedienta de bondad, de compasión y de justicia. Damián, como Jesús, pasó por la vida haciendo el bien. Pidámosle que ése sea también nuestro camino de santidad”, cambiamos de situación –patio de baloncesto- donde, acompañados por los acordes de la canción “Dejando huellas”, se fue desplegando la pancarta de la fachada interior al tiempo que mil trescientos globos se elevaban al cielo bajo la atónita y feliz mirada de los más pequeños.
Despedidas las familias y alumnos nos constituimos en claustro extraordinario: Nacho Robledo ss.cc explica lo que supone esta canonización para la Congregación y sus obras. Hace un recorrido presentando los materiales, actividades y eventos que se van a organizar y anima a todos a colaborar en llevarlos a buen término.
Finalmente Luisa Fernanda agradece a todos su participación y remarca la importancia que para el Colegio tiene esta efeméride. Detrás de todo ello está el Equipo Directivo, Equipo de Pastoral, Claustro de Profesores, Personal no docente, Familias, Alumnos… un trabajo ilusionado e ilusionante al que nos anima desde este momento.
Un gratificante café con pastas, compartido con la Junta Directiva de APA, pone el colofón a una tarde especial que empezaba con el cosquilleo de los alumnos y termina con el de los adultos convocados a una hermosa tarea. Punto y seguido…
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